Los colegios Padre Marchena y Juan XXIII Marchena (Sevilla) ha recibido de nuevo este año las banderas verdes que le acreditan como ecoescuelas. «Junto con el profesor Antonio Mérida, trabajamos con el entorno natural y humano, con la energía y los residuos. Hemos traído un regalo a cada centro premiado. Es una cesta con jabones que fabricamos y productos de comercio justo» dice Ángel Gil, alumno de este colegio.
Los alumnos del colegio Antonio Checa Martínez, de Torre del Mar (Málaga) tambien premiado, llevan el bocadillo del recreo en tupperware. Además, sus madres utilizan talegas de pan. Así han aprendido a reducir las bolsas de plástico.
«Les enseñamos un código de conducta que luego aplican en casa. Es una experiencia muy bonita», dice la profesora Clementina Rodríguez. Este centro educativo y otros 18 más de Andalucía recibieron ayer la bandera verde de ecoescuela. El galardón, concedido por tres años, acredita el compromiso de los niños por la conservación del medio ambiente. Residuos, agua, energía y respeto del entorno han sido los temas tratados en este curso.
Ecoescuelas
Clementina Rodríguez.
Colegio Antonio Checa Martínez. Torre del Mar (Málaga). «Es nuestra primera bandera verde. Trabajamos con la energía, el agua y el senderismo. Elaboramos jabón solidario que enviamos a Camerún y al Sahara y reducimos las bolsas de plástico, papel y aluminio».
Francisco Domínguez.
Colegio El Faro de Mazagón (Huelva). «Fuimos pioneros como ecoescuela. Ahora renovamos la bandera. En el centro tenemos un huerto, un conejero y un estanque. Hemos publicado dos libros: un ecodicionario y otro sobre los arbustos de Mazagón».
Ángel Gil.
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