JAS.-Las lluvias de los últimos meses han provocado despredimientos de tierra en la zona de El Lavadero, y la destrucción de conducciones de aguas residuales, que vierten directamente un liquido con fuerte olor a alperchín al arroyo de El Lavadero.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir realizó hace varios años una importante actuación para la recuperación de los márgenes del arroyo del Lavadero, al tiempo que construyó un nuevo parque junto a la zona.
En enero, era visible el vertido de aguas residuales con olor a alpechín directamente al arroyo, recuperado con fondos públicos, y la destrucción de laderas, con la consiguiente contaminación del arroyo.
Hoy la situación ha empeorado, pues no se ha intervenido en este zona y las lluvias, al tiempo que el alpechín han continuado su efecto erosionante.Además, el efecto erosionante del vertido ha dejado al descubierto otra conducción de agua más profunda, que de continuar esta situación podría verse también deteriorada. En el caso de que dicha conducción fuese de agua potable, podrían mezclarse en este punto las aguas residuales y las de consumo humano, provocando un importante problema de salud pública. Cerca de esta zona transcurre el trazado de la tubería del plan Ecija, que abastece de agua a varios municipios de la comarca.
Además, la destrucción de las laderas ha llegado ya al parque Francisco Malagón, construido por
la Confederación Hidrografica, lo que constituye un problema de seguridad, pues no existen vayas ni cordones que impidan el acceso a la zona. En esta zona, el arroyo del lavadero ha llegado a provocar en los años más lluviosos el corte de la carretera nacional, fruto de la erosión
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